El vídeo ha venido para quedarse. ¿Quién prefiere leer un montón de palabras en vez de ver un vídeo?

La mayoría de los usuarios cuando entran a una página web en busca de información, disponen de poco tiempo y están a solo un click, para que puedas captar su atención y no se vayan a la competencia.

Según Jakob Nielsen los usuarios de Internet no leen, buscan en la página algo que le llame a la atención a través de un barrido visual. Esto indica que debemos hacer que la experiencia de nuestros usuarios sea lo más agradable posible, ofreciendo contenido más creativo y llamativo.

No todas las web necesitan contar con un vídeo. Todo dependerá de la naturaleza del negocio y de la novedad del producto.

Para una gestoría de servicios contables tener un vídeo en la página web no es imprescindible, basta con tener la cantidad de información necesaria y de organizar la información de tal forma que sea legible para el usuario (utilización de negritas, viñetas, títulos bien colocados, etc…)

Sin embargo, para una empresa que tiene un producto muy novedoso, difícil de entender a la primera, es recomendable que use un video corporativo como herramienta para captar la atención del cliente y que el mensaje llegue cómo tiene que llegar.

En conclusión,

• Evitaremos llamadas frecuentes de clientes que no comprenden qué le ofrecemos.
• Lograremos mejorar la experiencia de nuestros clientes en la web, gracias a la transmisión de la información rápida y sencilla.
• Aumentaremos el número de clientes, al evitar que se vayan de nuestra web porque no entiendan qué le podemos ofrecer.

En fin, las reglas del marketing han cambiado. Los usuarios son cada vez más exigentes, dada la gran cantidad de productos o servicios sustitutivos/complementarios que están a su disposición en el mercado.